El diente

El diente


A mi querida amiga Lorena, pues sin ella este cuento no hubiera sido posible.

Había una vez un niño que creía en las hadas y en los cuentos, porque la magia en los libros siempre existía.
Un buen día, al niño se le cayó su primer diente, lo cogió con mimo, y lo depositó con delicadeza bajo su almohada. Colocó un trocito de queso sobre la mesilla de noche para que el Ratoncito Pérez se lo comiera cuando viniera a llevarse su diente a cambio de unas monedas; esa noche soñó con tener un hámster para cuidarlo, alimentarlo, y jugar con él.
Cuando despertó a la mañana siguiente

Canino

póster de la película Canino de Yorgos Lanthimos
Hoy vengo con Canino, del griego Yorgos Lanthimos, una película a la que le tenía muchas ganas, pues siempre es una de las más citadas dentro del conjunto de películas raras.
Toda la obra resulta bastante desconcertante, aun después de entender todo; sin embargo mantiene una atmósfera extrañamente fría, inexpresiva, con una banda sonora ausente, abunda el blanco y los colores pastel, contrastando con el rojo de la sangre. Esto recuerda a la locura del pabellón psiquiátrico, al tedio de los días; ambas obras no guardan excesiva relación, más allá de atmósferas opresoras y del control mental que se pretende ejercer por distintos medios, sin embargo, el cuco siempre revolotea.
Canino comienza con tres hermanos, una clase de idiomas grabada en casete, y con sexo,

Compárteme, utilízame, soy tuyo.

Suscríbete y recibe un super regalo gratis.

* indicates required